Queridos hermanos y hermanas, al explorar el profundo tema del fin de los tiempos, busquemos sabiduría y entendimiento en las sagradas escrituras. La Biblia presenta este tema con claridad, ofreciendo esperanza y guía en medio de las incertidumbres. Los tiempos finales a menudo se describen con imágenes vívidas y poderosas profecías. Habla de eventos que ocurrirán cuando el mundo tal como lo conocemos llegue a su fin. Estas escrituras sirven como un recordatorio del plan supremo de Dios y Su soberanía sobre toda la creación.
En la Biblia, encontramos descripciones de señales que anunciarán el fin. Hay profecías sobre desastres naturales, guerras y el surgimiento de falsos profetas. Estas no están destinadas a infundir miedo, querido amigo, sino a alentarnos a permanecer firmes en nuestra fe. Estamos llamados a velar y orar, manteniendo nuestros corazones alineados con la voluntad de Dios.
La Biblia también habla de un tiempo en que los creyentes se reunirán con el Señor. Esto se conoce como la esperanza bienaventurada, una promesa de vida eterna donde no habrá más dolor ni tristeza. Es un tiempo cuando la justicia prevalecerá y el reino de Dios se establecerá para siempre. Al reflexionar sobre estas verdades, recordemos las parábolas que Jesús contó sobre la importancia de estar preparados. Como las vírgenes prudentes que mantuvieron sus lámparas llenas de aceite, nosotros también debemos estar listos, viviendo de una manera que honre a Dios diariamente.
En estos días de incertidumbre, encontremos consuelo en la certeza de que Dios está con nosotros. Él es nuestro refugio y fortaleza, una ayuda siempre presente en los problemas. Se nos anima a vivir con propósito, compartiendo la luz de Cristo con el mundo. Mientras esperamos el cumplimiento de estas profecías, permanezcamos fieles, sabiendo que las promesas de Dios son seguras.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras de la Biblia a continuación que hablan sobre el fin de los tiempos.
“Vi un cielo nuevo una tierra nueva; porque el primer cielo la primera tierra pasaron, el mar ya no existía más”
— Apocalipsis 21:1
“Pero del día la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino solo mi Padre”
— Mateo 24:36
“Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, los elementos ardiendo serán deshechos, la tierra las obras que en ella hay serán quemadas”
— 2 Pedro 3:10
“Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche”
— 1 Tesalonicenses 5:2
“He aquí que viene con las nubes, todo ojo le verá, los que le traspasaron; todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén”
— Apocalipsis 1:7
“En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo; será tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallen escritos en el libro”
— Daniel 12:1
“Será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; entonces vendrá el fin”
— Mateo 24:14
“He aquí yo vengo pronto, mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra”
— Apocalipsis 22:12
“Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, uno su nombre”
— Zacarías 14:9
“También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos”
— 2 Timoteo 3:1
“Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de los montes, será exaltado sobre los collados, correrán a él todas las naciones”
— Isaías 2:2
“El sol se convertirá en tinieblas, la luna en sangre, antes que venga el día grande espantoso de Jehová”
— Joel 2:31
“Hijitos, ya es el último tiempo; según vosotros oísteis que el anticristo viene, así ahora han surgido muchos anticristos; por esto conocemos que es el último tiempo”
— 1 Juan 2:18
“Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis”
— Mateo 24:44
“Miré cuando abrió el sexto sello, he aquí hubo un gran terremoto; el sol se puso negro como tela de cilicio, la luna se volvió toda como sangre”
— Apocalipsis 6:12
“Nadie os engañen ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición”
— 2 Tesalonicenses 2:3
“Pero de aquel día de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre”
— Marcos 13:32
“Entonces vi el cielo abierto; he aquí un caballo blanco, el que lo montaba se llamaba Fiel Verdadero, con justicia juzga pelea”
— Apocalipsis 19:11
“Entonces habrá señales en el sol, en la luna en las estrellas, en la tierra angustia de las gentes, confundidas a causa del bramido del mar de las olas”
— Lucas 21:25
“Hacía que a todos, pequeños grandes, ricos pobres, libres esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente”
— Apocalipsis 13:16
“He aquí el día de Jehová viene, terrible, de indignación ardor de ira, para convertir la tierra en soledad, raer de ella a sus pecadores”
— Isaías 13:9
“He aquí, yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, guarda sus ropas, para que no ande desnudo, vean su vergüenza”
— Apocalipsis 16:15
“Miraba yo en la visión de la noche, he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días, le hicieron acercarse delante de él”
— Daniel 7:13
“Porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá”
— Mateo 24:21
“El séptimo ángel tocó la trompeta, hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor de su Cristo; él reinará por los siglos de los siglos”
— Apocalipsis 11:15
“En un momento, en un abrir cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, los muertos serán resucitados incorruptibles, nosotros seremos transformados”
— 1 Corintios 15:52
“El sol se convertirá en tinieblasY la luna en sangreAntes que venga el día del SeñorGrande manifiesto”
— Hechos 2:20
“De estos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares”
— Judas 1:14
“Día de ira aquel día, día de angustia de aprieto, día de alboroto de asolamiento, día de tiniebla de oscuridad, día de nublado de entenebrecimiento”
— Sofonías 1:15
“Subirás contra mi pueblo Israel como nublado para cubrir la tierra; será al cabo de los días; te traeré sobre mi tierra, para que las naciones me conozcan, cuando sea santificado en ti, oh Gog, delante de sus ojos”
— Ezequiel 38:16
“Del templo salió otro ángel, clamando a gran voz al que estaba sentado sobre la nube: Mete tu hoz, siega; porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra está madura”
— Apocalipsis 14:15
“Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, con trompeta de Dios, descenderá del cielo; los muertos en Cristo resucitarán primero”
— 1 Tesalonicenses 4:16
“Yo sé que mi Redentor viveY al fin se levantará sobre el polvo”
— Job 19:25
“Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria”
— Mateo 25:31
“Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra”
— Apocalipsis 3:10
“No se apartará el furor de Jehová hasta que lo haya hecho, hasta que haya cumplido los pensamientos de su corazón; en los postreros días lo entenderéis cumplidamente”
— Jeremías 23:20
“Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos nueva tierra; de lo primero no habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento”
— Isaías 65:17
“Vi a los muertos, grandes pequeños, de pie ante Dios; los libros fueron abiertos, otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras”
— Apocalipsis 20:12
“Pero tú, Daniel, cierra las palabras sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, la ciencia se aumentará”
— Daniel 12:4
“El primer ángel tocó la trompeta, hubo granizo fuego mezclados con sangre, que fueron lanzados sobre la tierra; la tercera parte de los árboles se quemó, se quemó toda la hierba verde”
— Apocalipsis 8:7
“No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz”
— Juan 5:28
“Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno, todos los soberbios todos los que hacen maldad serán estopa; aquel día que vendrá los abrasará, ha dicho Jehová de los ejércitos, no les dejará ni raíz ni rama”
— Malaquías 4:1
“Vosotros, pues, también, estad preparados, porque a la hora que no penséis, el Hijo del Hombre vendrá”
— Lucas 12:40
“Pero por tu dureza por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira de la revelación del justo juicio de Dios”
— Romanos 2:5
“Yo le dije: Señor, tú lo sabes. él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, han lavado sus ropas, las han emblanquecido en la sangre del Cordero”
— Apocalipsis 7:14
“Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, apartarán a los malos de entre los justos”
— Mateo 13:49
“Por lo cual alegraos, cielos, los que moráis en ellos. ¡Ay de los moradores de la tierra del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo”
— Apocalipsis 12:12
“¡Ah, cuán grande es aquel día!, tanto, que no hay otro semejante a él; tiempo de angustia para Jacob; pero de ella será librado”
— Jeremías 30:7
“Acontecerá en los postreros tiempos que el monte de la casa de Jehová será establecido por cabecera de montes, más alto que los collados, correrán a él los pueblos”
— Miqueas 4:1
“Bienaventurado el que lee, los que oyen las palabras de esta profecía, guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca”
— Apocalipsis 1:3
“Los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo”
— Hechos 1:11
“Por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio la ofrenda. Después con la muchedumbre de las abominaciones vendrá el desolador, hasta que venga la consumación, lo que está determinado se derrame sobre el desolador”
— Daniel 9:27
“El diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego azufre, donde estaban la bestia el falso profeta; serán atormentados día noche por los siglos de los siglos”
— Apocalipsis 20:10
“Sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias”
— 2 Pedro 3:3