Queridos hermanos y hermanas, hoy nos reunimos para discutir un asunto de gran importancia: la apostasía. Este tema es crucial para nuestro viaje espiritual y la comprensión de la fe. La apostasía, queridos amigos, se refiere al acto de alejarse o apartarse de la verdad de Dios. Es un asunto serio, ya que toca el núcleo de nuestra relación con el Todopoderoso.
A lo largo de la Biblia, encontramos numerosas advertencias y ejemplos de apostasía. Recordemos la historia del rey Saúl, quien comenzó su reinado como un humilde siervo de Dios, pero luego se apartó, desobedeciendo los mandatos del Señor. Su caída en desgracia nos muestra los peligros de descuidar la guía de Dios. De manera similar, los israelitas, a pesar de presenciar milagros y recibir la ley divina, repetidamente se apartaron de Dios para adorar ídolos. Su camino sirve como una advertencia de cuán fácilmente el corazón puede desviarse del camino de la rectitud.
Queridos amigos, es esencial permanecer vigilantes y firmes en nuestra fe. La Biblia nos advierte que en los últimos días, muchos abandonarán su fe, influenciados por doctrinas falsas y enseñanzas engañosas. Por eso es vital enraizarnos profundamente en la Palabra de Dios y buscar Su sabiduría diariamente. La oración y el compañerismo con otros creyentes son también cruciales para fortalecer nuestra resolución y mantenernos en el camino estrecho.
Recuerden, queridos hermanos y hermanas, que la apostasía no se trata solo de rechazar abiertamente la fe. Puede ser sutil, manifestándose en la complacencia, el descuido de las prácticas espirituales o comprometiendo las verdades bíblicas. Debemos guardar nuestros corazones y mentes, siempre alineando nuestras vidas con la voluntad de Dios. Al hacerlo, permanecemos como siervos fieles, iluminando con Su luz en un mundo que a menudo se desvía de Su verdad.
Si este mensaje resuena en ustedes, les animo a compartirlo con otros, ya que estamos llamados a apoyarnos y levantarnos unos a otros en nuestros viajes espirituales. Juntos, podemos mantenernos firmes contra la marea de apostasía y permanecer fieles a nuestro Señor.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras bíblicas a continuación que hablan sobre la apostasía.
“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores a doctrinas de demonios”
— 1 Timoteo 4:1
“Nadie os engañen ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición”
— 2 Tesalonicenses 2:3
“Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados gustaron del don celestial, fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, asimismo gustaron de la buena palabra de Dios los poderes del siglo venidero, recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios exponiéndole a vituperio”
— Hebreos 6:4-6
“Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios”
— Hebreos 10:26-27
“Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos, su postrer estado viene a ser peor que el primero. Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado. Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito, la puerca lavada a revolcarse en el cieno”
— 2 Pedro 2:20-22
“Muchos tropezarán entonces, se entregarán unos a otros, unos a otros se aborrecerán. muchos falsos profetas se levantarán, engañarán a muchos; por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará. Mas el que persevere hasta el fin, este será salvo”
— Mateo 24:10-13
“Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros”
— 1 Juan 2:19
“Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente”
— Gálatas 1:6
“Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo. Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis recibido, u otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo toleráis”
— 2 Corintios 11:3-4
“Manteniendo la fe buena conciencia, desechando la cual naufragaron en cuanto a la fe algunos, de los cuales son Himeneo Alejandro, a quienes entregué a Satanás para que aprendan a no blasfemar”
— 1 Timoteo 1:19-20
“Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, apartarán de la verdad el oído se volverán a las fábulas”
— 2 Timoteo 4:3-4
“Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, niegan a Dios el único soberano, a nuestro Señor Jesucristo”
— Judas 1:4
“Tu maldad te castigará, tus rebeldías te condenarán; sabe, pues, ve cuán malo amargo es el haber dejado tú a Jehová tu Dios, faltar mi temor en ti, dice el Señor, Jehová de los ejércitos”
— Jeremías 2:19
“¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás”
— Isaías 1:4
“Extenderé mi mano sobre Judá, sobre todos los habitantes de Jerusalén, exterminaré de este lugar los restos de Baal, el nombre de los ministros idólatras con sus sacerdotes; a los que sobre los terrados se postran al ejército del cielo, a los que se postran jurando por Jehová jurando por Milcom; a los que se apartan de en pos de Jehová, a los que no buscaron a Jehová, ni le consultaron”
— Sofonías 1:4-6
“Mas si el justo se apartare de su justicia cometiere maldad, hiciere conforme a todas las abominaciones que el impío hizo, ¿vivirá él? Ninguna de las justicias que hizo le serán tenidas en cuenta; por su rebelión con que prevaricó, por el pecado que cometió, por ello morirá”
— Ezequiel 18:24
“Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo”
— Hebreos 3:12
“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, en tu nombre echamos fuera demonios, en tu nombre hicimos muchos milagros? entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad”
— Mateo 7:21-23
“Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, ya no andaban con él”
— Juan 6:66
“Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caído, arrepiéntete, haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido”
— Apocalipsis 2:4-5
“Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca”
— Apocalipsis 3:15-16
“De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído”
— Gálatas 5:4
“Mira, pues, la bondad la severidad de Dios; la severidad ciertamente para con los que cayeron, pero la bondad para contigo, si permaneces en esa bondad; pues de otra manera tú también serás cortado”
— Romanos 11:22
“Los de sobre la piedra son los que habiendo oído, reciben la palabra con gozo; pero estos no tienen raíces; creen por algún tiempo, en el tiempo de la prueba se apartan”
— Lucas 8:13
“Su palabra carcomerá como gangrena; de los cuales son Himeneo Fileto, que se desviaron de la verdad, diciendo que la resurrección ya se efectuó, trastornan la fe de algunos”
— 2 Timoteo 2:17-18
“Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra”
— Tito 1:16
“Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, fueron traspasados de muchos dolores”
— 1 Timoteo 6:10
“Porque por ahí andan muchos, de los cuales os dije muchas veces, aun ahora lo digo llorando, que son enemigos de la cruz de Cristo; el fin de los cuales será perdición, cuyo dios es el vientre, cuya gloria es su vergüenza; que solo piensan en lo terrenal”
— Filipenses 3:18-19
“El hombre que se aparta del camino de la sabiduríaVendrá a parar en la compañía de los muertos”
— Proverbios 21:16
“Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño. de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos”
— Hechos 20:29-30
“Cuando Salomón era ya viejo, sus mujeres inclinaron su corazón tras dioses ajenos, su corazón no era perfecto con Jehová su Dios, como el corazón de su padre David”
— 1 Reyes 11:4
“Si te incitare tu hermano, hijo de tu madre, o tu hijo, tu hija, tu mujer o tu amigo íntimo, diciendo en secreto: Vamos sirvamos a dioses ajenos, que ni tú ni tus padres conocisteis, de los dioses de los pueblos que están en vuestros alrededores, cerca de ti o lejos de ti, desde un extremo de la tierra hasta el otro extremo de ella; no consentirás con él, ni le prestarás oído; ni tu ojo le compadecerá, ni le tendrás misericordia, ni lo encubrirás”
— Deuteronomio 13:6-8
“Salió al encuentro de Asa, le dijo: Oídme, Asa todo Judá Benjamín: Jehová estará con vosotros, si vosotros estuviereis con él; si le buscareis, será hallado de vosotros; mas si le dejareis, él también os dejará”
— 2 Crónicas 15:2
“Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, pone carne por su brazo, su corazón se aparta de Jehová”
— Jeremías 17:5
“¡Ay de los que descienden a Egipto por ayuda, confían en caballos; su esperanza ponen en carros, porque son muchos, en jinetes, porque son valientes; no miran al Santo de Israel, ni buscan a Jehová”
— Isaías 31:1