Queridos hermanos y hermanas, exploremos el hermoso don de la fe, una piedra angular de nuestro viaje espiritual. La fe es más que solo creencia; es la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve. Es la confianza que depositamos en lo divino, incluso cuando el camino por delante parece incierto. La fe es la llama que ilumina nuestro camino, dándonos fuerza y valentía para enfrentar los desafíos de la vida.
Consideren la historia de Abraham, a quien a menudo se le llama el padre de la fe. Cuando Dios lo llamó a dejar su tierra natal e ir a un lugar que no conocía, Abraham obedeció. Confió en la promesa de Dios de hacerlo padre de muchas naciones, incluso cuando él y su esposa Sara eran ancianos. Su fe le fue contada por justicia. Esto nos enseña que la fe no es pasiva, sino que requiere acción y confianza en las promesas de Dios.
Querido amigo, piensa en la fe de la mujer que tocó el manto de Jesús, creyendo que sería sanada. Su fe fue recompensada con sanación, mostrándonos que la fe puede llevar a resultados milagrosos. La fe no se trata solo de grandes actos, sino también de las pequeñas decisiones cotidianas de confiar en Dios, incluso cuando las cosas parecen inciertas.
La fe también se demuestra en las vidas de aquellos que se mantuvieron firmes ante las pruebas. La confianza de Daniel en Dios lo mantuvo a salvo en el foso de los leones, y la fe de Sadrac, Mesac y Abednego los protegió en el horno de fuego. Estas historias nos recuerdan que la fe puede sostenernos en los tiempos más difíciles, proporcionando una sensación de paz y certeza de que Dios está con nosotros.
Hermano y hermana, aferrémonos firmemente a nuestra fe. Es nuestro ancla en la tormenta, nuestra luz en la oscuridad. Animémonos unos a otros a crecer en la fe, sabiendo que agrada a Dios y nos acerca a Él. Comparte estas verdades con otros, y deja que tu fe sea un testimonio para el mundo.
Queridos amigos, ahora veamos a continuación las escrituras bíblicas que hablan sobre la fe.
“Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”
— Hebreos 11:1
“Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento echada de una parte a otra”
— Santiago 1:6
“Así que la fe es por el oír, el oír, por la palabra de Dios”
— Romanos 10:17
“(porque por fe andamos, no por vista)”
— 2 Corintios 5:7
“Respondiendo Jesús, les dijo: Tened fe en Dios. Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate échate en el mar, no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho. Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, os vendrá”
— Marcos 11:22-24
“Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; esto no de vosotros, pues es don de Dios”
— Efesios 2:8
“Con Cristo estoy juntamente crucificado, ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó se entregó a sí mismo por mí”
— Gálatas 2:20
“Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, se pasará; nada os será imposible”
— Mateo 17:20
“Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, que es galardonador de los que le buscan”
— Hebreos 11:6
“Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe”
— 1 Juan 5:4
“Respondiendo Jesús, les dijo: De cierto os digo, que si tuviereis fe, no dudareis, no solo haréis esto de la higuera, sino que si a este monte dijereis: Quítate échate en el mar, será hecho”
— Mateo 21:21
“Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá”
— Romanos 1:17
“Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, esforzaos”
— 1 Corintios 16:13
“Puestos los ojos en Jesús, el autor consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, se sentó a la diestra del trono de Dios”
— Hebreos 12:2
“Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma”
— Santiago 2:17
“A quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable glorioso; obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas”
— 1 Pedro 1:8-9
“Debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, hermanos, como es digno, por cuanto vuestra fe va creciendo, el amor de todos cada uno de vosotros abunda para con los demás”
— 2 Tesalonicenses 1:3
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”
— Filipenses 4:13
“Arraigados sobreedificados en él, confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias”
— Colosenses 2:7
“Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo fuiste llamado, habiendo hecho la buena profesión delante de muchos testigos”
— 1 Timoteo 6:12
“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe”
— 2 Timoteo 4:7
“Para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios”
— 1 Corintios 2:5
“Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?”
— Juan 11:40
“Dijeron los apóstoles al Señor: Auméntanos la fe. Entonces el Señor dijo: Si tuvierais fe como un grano de mostaza, podríais decir a este sicómoro: Desarráigate, plántate en el mar; os obedecería”
— Lucas 17:5-6
“Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho”
— Mateo 9:29
“Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, serás salvo, tú tu casa”
— Hechos 16:31
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16
“Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno”
— Efesios 6:16
“Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe de amor, con la esperanza de salvación como yelmo”
— 1 Tesalonicenses 5:8
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo”
— Romanos 5:1
“Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús”
— Gálatas 3:26
“Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; el que en mí cree, no tendrá sed jamás”
— Juan 6:35
“Estad quietos, conoced que yo soy DiosSeré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra”
— Salmos 46:10
“La cabeza de Efraín es Samaria, la cabeza de Samaria el hijo de Remalías. Si vosotros no creyereis, de cierto no permaneceréis”
— Isaías 7:9
“Al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo”
— 1 Pedro 5:9
“Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, lavados los cuerpos con agua pura”
— Hebreos 10:22
“Pero el que duda sobre lo que come, es condenado, porque no lo hace con fe; todo lo que no proviene de fe, es pecado”
— Romanos 14:23
“No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí”
— Juan 14:1
“Entonces respondiendo Jesús, dijo: Oh mujer, grande es tu fe; hágase contigo como quieres. su hija fue sanada desde aquella hora”
— Mateo 15:28
“Oyéndolo Jesús, le respondió: No temas; cree solamente, será salva”
— Lucas 8:50
“Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual hablé, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos”
— 2 Corintios 4:13
“Nosotros hemos conocido creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; el que permanece en amor, permanece en Dios, Dios en él”
— 1 Juan 4:16
“Por la fe en su nombre, a este, que vosotros veis conocéis, le ha confirmado su nombre; la fe que es por él ha dado a este esta completa sanidad en presencia de todos vosotros”
— Hechos 3:16
“Por la fe también la misma Sara, siendo estéril, recibió fuerza para concebir; dio a luz aun fuera del tiempo de la edad, porque creyó que era fiel quien lo había prometido”
— Hebreos 11:11