Queridos amigos, al reunirnos para profundizar en el concepto profundo de la justificación por la fe, reconozcamos primero su papel fundamental en nuestro viaje espiritual. Esta verdad habla directamente al corazón de nuestra relación con Dios. La justificación por la fe nos asegura que somos hechos justos ante Dios, no por nuestras propias obras, sino a través de la fe en Su gracia. Este es un regalo, queridos hermanos y hermanas, no algo que podamos ganar o comprar. Es una declaración divina de que somos aceptados y amados por Dios.
Imaginen, si quieren, la historia de Abraham, nuestro padre en la fe. A pesar de las probabilidades y su avanzada edad, creyó en la promesa de Dios. Su fe, no sus obras, fue contada como justicia. Este ejemplo nos enseña que la fe se trata de confiar en las promesas de Dios, incluso cuando las circunstancias parecen imposibles. Es un recordatorio de que nuestra fe, como la de Abraham, nos ancla en la esperanza y nos lleva a la justicia.
Recordemos también al apóstol Pablo, quien predicó incansablemente este mensaje. Él enfatizó que nuestra justificación es solo por la fe, aparte de las obras de la ley. Sus cartas nos recuerdan que nadie puede jactarse de su propia justicia. Más bien, todos somos iguales receptores de la gracia de Dios a través de la fe en Jesucristo. Esta gracia transforma nuestros corazones y renueva nuestros espíritus, permitiéndonos vivir de una manera que honra a Dios.
Como creyentes, esta comprensión nos libera de la carga de tratar de ganar el favor de Dios. Nos llama a descansar en la obra terminada de Cristo en la cruz. Nuestra fe nos une con Jesús, quien llevó nuestros pecados y resucitó victoriosamente. En Él, somos justificados y reconciliados con Dios.
Queridos amigos, espero que este mensaje les traiga aliento y claridad. Si resuena con ustedes, los invito a compartirlo con otros. Ahora, veamos a continuación las escrituras de la Biblia que hablan sobre la justificación por la fe.
“Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley”
— Romanos 3:28
“Sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado”
— Gálatas 2:16
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo”
— Romanos 5:1
“De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a fin de que fuésemos justificados por la fe”
— Gálatas 3:24
“Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se glorí”
— Efesios 2:8-9
“Mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia”
— Romanos 4:5
“Que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá”
— Gálatas 3:11
“Para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna”
— Tito 3:7
“La justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia”
— Romanos 3:22
“Ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe”
— Filipenses 3:9
“Porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree”
— Romanos 10:4
“Porque si Abraham fue justificado por las obras, tiene de qué gloriarse, pero no para con Dios”
— Romanos 4:2
“De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído”
— Gálatas 5:4
“Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira”
— Romanos 5:9
“A los que predestinó, a estos también llamó; a los que llamó, a estos también justificó; a los que justificó, a estos también glorificó”
— Romanos 8:30
“La Escritura, previendo que Dios había de justificar por la fe a los gentiles, dio de antemano la buena nueva a Abraham, diciendo: En ti serán benditas todas las naciones”
— Gálatas 3:8
“Con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, el que justifica al que es de la fe de Jesús”
— Romanos 3:26
“Verá el fruto de la aflicción de su alma, quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, llevará las iniquidades de ellos”
— Isaías 53:11
“¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica”
— Romanos 8:33
“Mas la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que es por la fe en Jesucristo fuese dada a los creyentes”
— Gálatas 3:22
“Sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro”
— Romanos 4:24
“Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá”
— Romanos 1:17
“Que de todo aquello de que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en él es justificado todo aquel que cree”
— Hechos 13:39
“No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo”
— Gálatas 2:21
“Mas el justo vivirá por feY si retrocediere, no agradará a mi alma”
— Hebreos 10:38
“Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, le fue contado por justicia”
— Romanos 4:3
“Se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, le fue contado por justicia, fue llamado amigo de Dios”
— Santiago 2:23
“Como también David habla de la bienaventuranza del hombre a quien Dios atribuye justicia sin obras”
— Romanos 4:6
“Recibió la circuncisión como señal, como sello de la justicia de la fe que tuvo estando aún incircunciso; para que fuese padre de todos los creyentes no circuncidados, a fin de que también a ellos la fe les sea contada por justicia”
— Romanos 4:11
“Así Abraham creyó a Dios, le fue contado por justicia”
— Gálatas 3:6
“Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida”
— Romanos 5:18
“Para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu”
— Gálatas 3:14
“Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús”
— Romanos 3:24
“Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él”
— 2 Corintios 5:21
“Si buscando ser justificados en Cristo, también nosotros somos hallados pecadores, ¿es por eso Cristo ministro de pecado? En ninguna manera”
— Gálatas 2:17
“¿Qué, pues, diremos? Que los gentiles, que no iban tras la justicia, han alcanzado la justicia, es decir, la justicia que es por fe”
— Romanos 9:30
“Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios”
— Juan 1:12
“Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; por esa fe condenó al mundo, fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe”
— Hebreos 11:7
“Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos”
— Romanos 5:19
“Esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, por el Espíritu de nuestro Dios”
— 1 Corintios 6:11
“Esto solo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el Espíritu por las obras de la ley, o por el oír con fe?”
— Gálatas 3:2
“Porque Dios es uno, él justificará por la fe a los de la circuncisión, por medio de la fe a los de la incircuncisión”
— Romanos 3:30
“Os digo que este descendió a su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera que se enaltece, será humillado; el que se humilla será enaltecido”
— Lucas 18:14
“Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu”
— Romanos 8:1