Queridos hermanos y hermanas, el adulterio es un asunto serio contra el cual tanto la Biblia como nuestros corazones nos advierten. Al profundizar en este tema, recordemos que las enseñanzas de la Biblia están destinadas a guiarnos hacia una vida de rectitud y amor. El adulterio no es solo un acto físico, sino también una violación de la confianza y del vínculo sagrado del matrimonio. Es importante entender que el matrimonio es un pacto, una promesa sagrada entre dos personas y Dios. Cuando este vínculo se rompe, no solo afecta a las personas involucradas, sino también a sus familias y comunidades.
En la Biblia, vemos numerosos ejemplos que muestran la gravedad de este pecado. Una de esas historias es la del rey David y Betsabé. David, un hombre conforme al corazón de Dios, sucumbió a la tentación y cometió adulterio con Betsabé. Este acto condujo a una serie de eventos trágicos, incluyendo el engaño y la eventual muerte del esposo de Betsabé, Urías. La historia de David nos enseña las consecuencias de apartarse del camino de Dios y la importancia del arrepentimiento.
Nuestro Señor Jesucristo también abordó este tema, enfatizando que el adulterio comienza en el corazón. Él enseñó que incluso mirar a alguien con lujuria es como cometer adulterio en el corazón. Esto resalta la necesidad de pureza no solo en acciones, sino también en pensamientos e intenciones.
Querido amigo, mantenerse fiel requiere vigilancia y compromiso. Exige que honremos a nuestros cónyuges y mantengamos la santidad del matrimonio. Al hacerlo, fortalecemos a nuestras familias y reflejamos el amor y la fidelidad de Dios. Busquemos la guía y la fortaleza de Dios para resistir la tentación y permanecer fieles a nuestros seres queridos.
Si nos encontramos luchando, recordemos que Dios es misericordioso y perdonador. Él nos llama a arrepentirnos y volver a Él. Su amor es constante, y Su gracia es suficiente para nosotros. Seamos una comunidad que se apoya mutuamente en mantener los valores que Dios nos ha establecido.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras de la Biblia a continuación que hablan sobre cometer adulterio.
“No cometerás adulterio”
— Éxodo 20:14
“Si un hombre cometiere adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero la adúltera indefectiblemente serán muertos”
— Levítico 20:10
“No cometerás adulterio”
— Deuteronomio 5:18
“Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio”
— Mateo 5:27
“Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón”
— Mateo 5:28
“Mas el que comete adulterio es falto de entendimientoCorrompe su alma el que tal hace”
— Proverbios 6:32
“Así es el que se llega a la mujer de su prójimoNo quedará impune ninguno que la tocare”
— Proverbios 6:29
“Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca”
— 1 Corintios 6:18
“Honroso sea en todos el matrimonio, el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios a los adúlteros los juzgará Dios”
— Hebreos 13:4
“Yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación, se casa con otra, adultera; el que se casa con la repudiada, adultera”
— Mateo 19:9
“Les dijo: Cualquiera que repudia a su mujer se casa con otra, comete adulterio contra ella”
— Marcos 10:11
“Si la mujer repudia a su marido se casa con otro, comete adulterio”
— Marcos 10:12
“Todo el que repudia a su mujer, se casa con otra, adultera; el que se casa con la repudiada del marido, adultera”
— Lucas 16:18
“Le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio”
— Juan 8:4
“Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, no peques más”
— Juan 8:11
“Porque la mujer casada está sujeta por la ley al marido mientras este vive; pero si el marido muere, ella queda libre de la ley del marido”
— Romanos 7:2
“Así que, si en vida del marido se uniere a otro varón, será llamada adúltera; pero si su marido muriere, es libre de esa ley, de tal manera que si se uniere a otro marido, no será adúltera”
— Romanos 7:3
“Para que te guarden de la mujer ajenaY de la extraña que ablanda sus palabras”
— Proverbios 7:5
“Camino al Seol es su casaQue conduce a las cámaras de la muerte”
— Proverbios 7:27
“Perjurar, mentir, matar, hurtar adulterar prevalecen, homicidio tras homicidio se suceden”
— Oseas 4:2
“Hurtando, matando, adulterando, jurando en falso, incensando a Baal, andando tras dioses extraños que no conocisteis”
— Jeremías 7:9
“¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”
— Santiago 4:4
“Sino como mujer adúltera, que en lugar de su marido recibe a ajenos”
— Ezequiel 16:32
“Porque han adulterado, hay sangre en sus manos, han fornicado con sus ídolos; aun a sus hijos que habían dado a luz para mí, hicieron pasar por el fuego, quemándolos”
— Ezequiel 23:37
“Vendré a vosotros para juicio; seré pronto testigo contra los hechiceros adúlteros, contra los que juran mentira, los que defraudan en su salario al jornalero, a la viuda al huérfano, los que hacen injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos”
— Malaquías 3:5
“Envió David mensajeros, la tomó; vino a él, él durmió con ella. Luego ella se purificó de su inmundicia, se volvió a su casa”
— 2 Samuel 11:4
“Concibió la mujer, envió a hacerlo saber a David, diciendo: Estoy encinta”
— 2 Samuel 11:5
“Entonces dijo David a Natán: Pequé contra Jehová. Natán dijo a David: También Jehová ha remitido tu pecado; no morirás”
— 2 Samuel 12:13
“Ni forniquemos, como algunos de ellos fornicaron, cayeron en un día veintitrés mil”
— 1 Corintios 10:8
“He aquí, yo la arrojo en cama, en gran tribulación a los que con ella adulteran, si no se arrepienten de las obras de ella”
— Apocalipsis 2:22
“No hay otro mayor que yo en esta casa, ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, pecaría contra Dios?”
— Génesis 39:9
“El ojo del adúltero está aguardando la nocheDiciendo: No me verá nadieY esconde su rostro”
— Job 24:15
“Porque los labios de la mujer extraña destilan mielY su paladar es más blando que el aceite”
— Proverbios 5:3
“Aleja de ella tu caminoY no te acerques a la puerta de su casa”
— Proverbios 5:8
“¿por qué, hijo mío, andarás ciego con la mujer ajenaY abrazarás el seno de la extraña?”
— Proverbios 5:20
“Serás librado de la mujer extrañaDe la ajena que halaga con sus palabras”
— Proverbios 2:16
“La cual abandona al compañero de su juventudY se olvida del pacto de su Dios”
— Proverbios 2:17
“Por lo cual su casa está inclinada a la muerteY sus veredas hacia los muertos”
— Proverbios 2:18
“Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación”
— 1 Tesalonicenses 4:3
“Que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad honor”
— 1 Tesalonicenses 4:4
“No en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios”
— 1 Tesalonicenses 4:5
“Pero fornicación toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos”
— Efesios 5:3
“Manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia”
— Gálatas 5:19
“Por cuanto David había hecho lo recto ante los ojos de Jehová, de ninguna cosa que le mandase se había apartado en todos los días de su vida, salvo en lo tocante a Urías heteo”
— 1 Reyes 15:5
“Sucedió que por juzgar ella cosa liviana su fornicación, la tierra fue contaminada, adulteró con la piedra con el leño”
— Jeremías 3:9
“Además, no tendrás acto carnal con la mujer de tu prójimo, contaminándote con ella”
— Levítico 18:20