Queridos hermanos y hermanas, la responsabilidad de guiar a los niños es una tarea sagrada. Al considerar el impacto de nuestras acciones y palabras en las mentes jóvenes, es vital abordar este deber con el máximo cuidado y reverencia. Desviar a un niño es un asunto serio que se aborda con profunda gravedad en la Biblia. Como administradores de las enseñanzas de Dios, debemos asegurarnos de que estamos criando a los niños en los caminos del amor, la verdad y la rectitud.
Reflexionando sobre esto, vemos que los niños son como brotes tiernos, necesitando guía y protección. Ellos observan y absorben todo a su alrededor. Cuando los guiamos con sabiduría e integridad, estamos plantando semillas de fe y valores que crecerán a lo largo de sus vidas. Sin embargo, engañar a un niño o dar un mal ejemplo puede tener efectos negativos duraderos. Por eso la Biblia nos advierte severamente contra tales acciones.
Consideremos el ejemplo de Jesús, quien acogió a los niños con los brazos abiertos y los bendijo. Él enfatizó su importancia y pureza, instándonos a ser como ellos en nuestra fe. Esto subraya el valor que Dios otorga a los niños, destacando la necesidad de guiarlos por caminos de rectitud. Cuando nos desviamos de este camino y los llevamos a hacer el mal, no solo los estamos dañando a ellos; estamos yendo en contra de las enseñanzas mismas de Cristo.
Nuestras acciones y palabras deben reflejar bondad, honestidad y amor, sirviendo como un faro para que los jóvenes lo sigan. Si fallamos en este deber, arriesgamos no solo el bienestar espiritual de los niños, sino también nuestra responsabilidad ante Dios. Por lo tanto, es crucial enseñarles con paciencia y comprensión, fomentando un ambiente donde puedan crecer en fe y sabiduría.
Comprometámonos a ser influencias positivas, enseñando a los niños los valores y la moral que se alinean con la palabra de Dios. Al hacerlo, cumplimos con nuestro deber divino y honramos la confianza que el Señor ha depositado en nosotros. Queridos amigos, ahora veamos las escrituras bíblicas a continuación que hablan sobre desviar a un niño.
“Cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, que se le hundiese en lo profundo del mar”
— Mateo 18:6
“Cualquiera que haga tropezar a uno de estos pequeñitos que creen en mí, mejor le fuera si se le atase una piedra de molino al cuello, se le arrojase en el mar”
— Marcos 9:42
“Mejor le fuera que se le atase al cuello una piedra de molino se le arrojase al mar, que hacer tropezar a uno de estos pequeñitos”
— Lucas 17:2
“Instruye al niño en su caminoY aun cuando fuere viejo no se apartará de él”
— Proverbios 22:6
“Vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina amonestación del Señor”
— Efesios 6:4
“Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten”
— Colosenses 3:21
“He aquí, herencia de Jehová son los hijosCosa de estima el fruto del vientre”
— Salmos 127:3
“Las repetirás a tus hijos, hablarás de ellas estando en tu casa, andando por el camino, al acostarte, cuando te levantes”
— Deuteronomio 6:7
“El que detiene el castigo, a su hijo aborreceMas el que lo ama, desde temprano lo corrige”
— Proverbios 13:24
“Castiga a tu hijo en tanto que hay esperanzaMas no se apresure tu alma para destruirlo”
— Proverbios 19:18
“No rehúses corregir al muchachoPorque si lo castigas con vara, no morirá”
— Proverbios 23:13
“La vara la corrección dan sabiduríaMas el muchacho consentido avergonzará a su madre”
— Proverbios 29:15
“Corrige a tu hijo, te dará descansoY dará alegría a tu alma”
— Proverbios 29:17
“Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos”
— Mateo 19:14
“Viéndolo Jesús, se indignó, les dijo: Dejad a los niños venir a mí, no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios”
— Marcos 10:14
“Mas Jesús, llamándolos, dijo: Dejad a los niños venir a mí, no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios”
— Lucas 18:16
“Todos tus hijos serán enseñados por Jehová; se multiplicará la paz de tus hijos”
— Isaías 54:13
“Les daré un corazón, un camino, para que me teman perpetuamente, para que tengan bien ellos, sus hijos después de ellos”
— Jeremías 32:39
“Que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús”
— 2 Timoteo 3:15
“Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?”
— Hebreos 12:7
“No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres”
— 1 Corintios 15:33
“Presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad”
— Tito 2:7
“No como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey”
— 1 Pedro 5:3
“Oíd, hijos, la enseñanza de un padreY estad atentos, para que conozcáis cordura”
— Proverbios 4:1
“No las encubriremos a sus hijosContando a la generación venidera las alabanzas de Jehovásu potencia, las maravillas que hizo”
— Salmos 78:4
“Porque yo sé que mandará a sus hijos a su casa después de sí, que guarden el camino de Jehová, haciendo justicia juicio, para que haga venir Jehová sobre Abraham lo que ha hablado acerca de él”
— Génesis 18:19
“Si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo mi casa serviremos a Jehová”
— Josué 24:15
“Le mostraré que yo juzgaré su casa para siempre, por la iniquidad que él sabe; porque sus hijos han blasfemado a Dios, él no los ha estorbado”
— 1 Samuel 3:13
“Su padre nunca le había entristecido en todos sus días con decirle: ¿Por qué haces así? Además, este era de muy hermoso parecer; había nacido después de Absalón”
— 1 Reyes 1:6
“Toda aquella generación también fue reunida a sus padres. se levantó después de ellos otra generación que no conocía a Jehová, ni la obra que él había hecho por Israel”
— Jueces 2:10
“Honra a tu padre a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da”
— Éxodo 20:12
“Delante de las canas te levantarás, honrarás el rostro del anciano, de tu Dios tendrás temor. Yo Jehová”
— Levítico 19:32
“Por tanto, guárdate, guarda tu alma con diligencia, para que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; antes bien, las enseñarás a tus hijos, a los hijos de tus hijos”
— Deuteronomio 4:9
“Las enseñaréis a vuestros hijos, hablando de ellas cuando te sientes en tu casa, cuando andes por el camino, cuando te acuestes, cuando te levantes”
— Deuteronomio 11:19
“Harás congregar al pueblo, varones mujeres niños, tus extranjeros que estuvieren en tus ciudades, para que oigan aprendan, teman a Jehová vuestro Dios, cuiden de cumplir todas las palabras de esta ley”
— Deuteronomio 31:12
“Luego les dijo: Id, comed grosuras, bebed vino dulce, enviad porciones a los que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro Señor; no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza”
— Nehemías 8:10
“Salen sus pequeñuelos como manadaY sus hijos andan saltando”
— Job 21:11
“Venid, hijos, oídmeEl temor de Jehová os enseñaré”
— Salmos 34:11
“Oye, hijo mío, la instrucción de tu padreY no desprecies la dirección de tu madre”
— Proverbios 1:8
“Porque Jehová al que ama castigaComo el padre al hijo a quien quiere”
— Proverbios 3:12
“Ahora, pues, hijos, oídmeY bienaventurados los que guardan mis caminos”
— Proverbios 8:32
“Los proverbios de SalomónEl hijo sabio alegra al padrePero el hijo necio es tristeza de su madre”
— Proverbios 10:1
“Corona de los viejos son los nietosY la honra de los hijos, sus padres”
— Proverbios 17:6
“Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, lleguen los años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento”
— Eclesiastés 12:1
“El que vive, el que vive, este te dará alabanza, como yo hoy; el padre hará notoria tu verdad a los hijos”
— Isaías 38:19
“De esto contaréis a vuestros hijos, vuestros hijos a sus hijos, sus hijos a la otra generación”
— Joel 1:3
“Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga hiera la tierra con maldición”
— Malaquías 4:6
“Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados”
— Efesios 5:1
“Así como también sabéis de qué modo, como el padre a sus hijos, exhortábamos consolábamos a cada uno de vosotros”
— 1 Tesalonicenses 2:11
“Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo”
— 1 Juan 2:1
“No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad”
— 3 Juan 1:4
“El necio menosprecia el consejo de su padreMas el que guarda la corrección vendrá a ser prudente”
— Proverbios 15:5
“La necedad está ligada en el corazón del muchachoMas la vara de la corrección la alejará de él”
— Proverbios 22:15
“El hijo sabio alegra al padreMas el hombre necio menosprecia a su madre”
— Proverbios 15:20
“Aun el muchacho es conocido por sus hechosSi su conducta fuere limpia recta”
— Proverbios 20:11
“El que guarda la ley es hijo prudenteMas el que es compañero de glotones avergüenza a su padre”
— Proverbios 28:7
“El ojo que escarnece a su padreY menosprecia la enseñanza de la madreLos cuervos de la cañada lo saquenY lo devoren los hijos del águila”
— Proverbios 30:17
“Los opresores de mi pueblo son muchachos, mujeres se enseñorearon de él. Pueblo mío, los que te guían te engañan, tuercen el curso de tus caminos”
— Isaías 3:12
“He aquí, todo el que usa de refranes te aplicará a ti el refrán que dice: Cual la madre, tal la hija”
— Ezequiel 16:44
“Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos”
— Oseas 4:6