Queridos hermanos y hermanas, al explorar el tema de la nueva creación, nos adentramos en una profunda transformación que ocurre en el corazón y el alma de cada creyente. Cuando hablamos de ser una nueva creación, nos referimos a la obra milagrosa que Dios realiza en nosotros cuando aceptamos Su amor y gracia. Esta transformación no es solo un cambio superficial, sino una renovación profunda de nuestro ser.
En las escrituras, aprendemos que aquellos que están en Cristo se convierten en nuevas creaciones. Las viejas formas de vivir, marcadas por el pecado y la separación de Dios, son reemplazadas por una nueva vida llena de esperanza, paz y propósito. Este cambio no es por nuestra propia fuerza o esfuerzos, sino por el poder del Espíritu Santo que trabaja en nosotros. Es un testimonio de la increíble misericordia y amor de Dios por nosotros, llevándonos de la oscuridad a Su luz maravillosa.
Consideren la historia de Pablo, quien una vez fue un ferviente perseguidor de cristianos. Después de encontrarse con Cristo, fue transformado en un apasionado apóstol, difundiendo el mensaje de amor y redención. Este es un hermoso ejemplo del poder de convertirse en una nueva creación. El cambio en la vida de Pablo fue tan profundo que dejó atrás su antigua identidad y abrazó un nuevo propósito, sirviendo a Dios con todo su corazón.
Ser una nueva creación también significa que somos parte de la familia de Dios. Ya no estamos definidos por nuestros errores o fracasos pasados. En cambio, se nos da un nuevo comienzo, una nueva identidad en Cristo. Esto nos lleva a una relación amorosa con Dios y con los demás, al formar parte de una comunidad de creyentes que se apoyan y animan mutuamente.
Queridos amigos, esta transformación es una promesa para todos los que creen. Es una invitación a entrar en una vida de alegría, amor y plenitud que solo Dios puede proporcionar. Si este mensaje toca su corazón, les animo a compartirlo con otros, para que ellos también puedan experimentar la maravilla de convertirse en una nueva creación en Cristo.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras de la Biblia a continuación que hablan sobre la ‘nueva creación’.
“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas”
— 2 Corintios 5:17
“Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale nada, ni la incircuncisión, sino una nueva creación”
— Gálatas 6:15
“Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva”
— Romanos 6:4
“Os daré corazón nuevo, pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, os daré un corazón de carne”
— Ezequiel 36:26
“Vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia santidad de la verdad”
— Efesios 4:24
“Revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno”
— Colosenses 3:10
“Respondió Jesús le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios”
— Juan 3:3
“He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, ríos en la soledad”
— Isaías 43:19
“El que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles verdaderas”
— Apocalipsis 21:5
“Nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración por la renovación en el Espíritu Santo”
— Tito 3:5
“Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive permanece para siempre”
— 1 Pedro 1:23
“Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu”
— Romanos 8:1
“He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel con la casa de Judá”
— Jeremías 31:31
“Les daré un corazón, un espíritu nuevo pondré dentro de ellos; quitaré el corazón de piedra de en medio de su carne, les daré un corazón de carne”
— Ezequiel 11:19
“El cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas”
— Filipenses 3:21
“Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados”
— 1 Corintios 15:22
“Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; no puede pecar, porque es nacido de Dios”
— 1 Juan 3:9
“Por medio de las cuales nos ha dado preciosas grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia”
— 2 Pedro 1:4
“Crea en mí, oh Dios, un corazón limpioY renueva un espíritu recto dentro de mí”
— Salmos 51:10
“Este es el pacto que haré con ellosDespués de aquellos días, dice el SeñorPondré mis leyes en sus corazonesY en sus mentes las escribiré”
— Hebreos 10:16
“Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios”
— Juan 1:12-13
“Él, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas”
— Santiago 1:18
“Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe”
— 1 Juan 5:4
“Con Cristo estoy juntamente crucificado, ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó se entregó a sí mismo por mí”
— Gálatas 2:20
“Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas”
— Efesios 2:10
“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable perfecta”
— Romanos 12:2
“Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día”
— 2 Corintios 4:16
“El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, trasladado al reino de su amado Hijo”
— Colosenses 1:13
“Esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, por el Espíritu de nuestro Dios”
— 1 Corintios 6:11
“Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos nueva tierra; de lo primero no habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento”
— Isaías 65:17
“Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante”
— 1 Corintios 15:45
“Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, nunca más saldrá de allí; escribiré sobre él el nombre de mi Dios, el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, mi nombre nuevo”
— Apocalipsis 3:12
“Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios”
— Juan 3:5
“Pero ahora estamos libres de la ley, por haber muerto para aquella en que estábamos sujetos, de modo que sirvamos bajo el régimen nuevo del Espíritu no bajo el régimen viejo de la letra”
— Romanos 7:6
“Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”
— Filipenses 1:6
“Les daré un corazón, un camino, para que me teman perpetuamente, para que tengan bien ellos, sus hijos después de ellos”
— Jeremías 32:39
“Echad de vosotros todas vuestras transgresiones con que habéis pecado, haceos un corazón nuevo un espíritu nuevo. ¿Por qué moriréis, casa de Israel?”
— Ezequiel 18:31
“He aquí se cumplieron las cosas primeras, yo anuncio cosas nuevas; antes que salgan a luz, yo os las haré notorias”
— Isaías 42:9
“Si sabéis que él es justo, sabed también que todo el que hace justicia es nacido de él”
— 1 Juan 2:29
“¿No sabéis que sois templo de Dios, que el Espíritu de Dios mora en vosotros?”
— 1 Corintios 3:16
“Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor”
— 2 Corintios 3:18
“Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos”
— Gálatas 3:27
“Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él”
— 2 Corintios 5:21
“Alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos”
— Efesios 1:18
“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer”
— Juan 15:5
“Sino vestíos del Señor Jesucristo, no proveáis para los deseos de la carne”
— Romanos 13:14
“El mismo Dios de paz os santifique por completo; todo vuestro ser, espíritu, alma cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo”
— 1 Tesalonicenses 5:23
“Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo”
— 1 Corintios 2:16
“El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu son vida”
— Juan 6:63
“Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, conoce a Dios”
— 1 Juan 4:7
“La esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado”
— Romanos 5:5
“Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?”
— 2 Corintios 13:5
“Para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu”
— Efesios 3:16
“Si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros”
— Romanos 8:11
“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable”
— 1 Pedro 2:9
“Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él”
— Colosenses 2:6
“Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro”
— Romanos 6:11
“Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones deseos”
— Gálatas 5:24
“Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz”
— Efesios 5:8
“Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación”
— 1 Tesalonicenses 4:3